Westminster

[Blaze K. Regal]

El londinense escuchó el gruñido por parte de la dragonalista pero al igual que hacía con muchas cosas que Montgomery decía, pues no le hacía mucho caso la verdad. Lo sentía por ella pero es que él no era el tal Dominik, además, si no se comportaba así le quitarían puntos en el carnet de amigo.

- Perdona pero mis genes son increíbles, aunque con mi hermano sólo comparto la madre en cuanto a genes - Recordó a Tim, a su verdadero padre, y quizás en ese momento se puso un poco triste al echarle de menos. Podrían pasar muchos años desde su muerte pero él seguía echando de menos a su padre. Aun así, estaba ahí para animar a Audrey así que alegró el gesto - Tienes que pensar en que volverá. No hablará mucho pero no tenía pinta de ser mal mago, además, seguro que le da fuerzas el querer volver contigo y esas cosas cursis de pareja. Y oye, mientras que vuelve nos tienes a Gerard y a mí, no tienes que estar sola.

[Audrey Montgomery]

La rubia se acabó el pretzel y llevó el papel, la servilleta y todo lo demás a una papelera. Que hay que cuidar el medio ambiente, bastante sufre ya la Madre Tierra. Mientras tanto maldijo interiormente a Blaze por ignorar sus gruñidos, al final tendrá que reconocer que es buen amigo y todo.

- ¡Eh! No puedes decir nada de cosas cursis de pareja, que empezaste tú con da Silva- se defendió haciéndole un poco de burla hasta que escuchó sus siguientes palabras- Un momento, ¿me estás proponiendo un trío?

¿AHORA? Ya es tarde, que se lo hubiese dicho hace unos años.

[Blaze K. Regal]

Bueno, sí que tenían su toque cursi en algunas ocasiones, lo reconocía, pero porque en el fondo no dejaban de ser dos chavales enamorados y cada vez que estaba con Da Silva se sentía de lo más cómodo y feliz. Quién se lo iba a decir. Por eso se ponía un poco en el lugar de Audrey, él no sabía cómo se sentiría si de repente Mith desapareciese, seguramente se hundiese pero quería pensar que si eso sucedía, entonces Gerard y Audrey aparecerían para animarle.

- Menudo ataque, qué exageración - Negó con la cabeza y luego se quedó mirando a Audrey - Claro - Dijo extrañado, sin entender por qué ponía esa cara ante ese plan. ¡Un segundo! Vale, ahora lo había pillado - ¡No en ese sentido! Un trío de hacer cosas juntos, yo qué sé, podemos ir un día a tomar algo, así te distraes. Quiero creer que si algún día estuviese mal porque a Mith le hubiese pasado algo, que Gerard y tú apareceríais para animarme. Eso es la amistad, ¿no? - Y se encogió ligeramente de hombros. Ya le vale a Audrey, malpensar con eso.

[Audrey Montgomery]

Por primera vez en lo que llevaban de tarde, la rubia esbozó una sonrisa sincera al escuchar a su amigo. Era divertido hacerlo rabiar, casi tanto como cronometrar los segundos que tardaba en darse cuenta de lo del trío. ¿Y este es el listo? Así va el país...

- Yo te llevaría a ver dragones. Y Gerard a un club con chicas ligeras de ropa. Supongo que sí, que eso es la amistad... Gracias, por estar ahí -dijo con sinceridad mientras le daba un beso en la mejilla

[Blaze K. Regal]

Ahí estaba lo que él buscaba, una sonrisa. Si en el fondo no era tan difícil. Lo que sí que era difícil era aguantarse los chistes sobre el novio de Audrey porque no quería que ella se sintiese mal, pero con lo callado que era el chico se lo ponía muy fácil. Menos mal que cuando estaba con Gerard sí podía soltarlos.

- Sí, muy típico de vosotros... - Asintió un par de veces con la cabeza y luego recibió ese beso en la mejilla que le sacó una sonrisa. Tras haber logrado su objetivo, se separó de la dragonalista - Nada, pero lo de ir a tomar algo con nosotros te lo pensarás, ¿verdad? O sino podemos ir a ver a tus dragones, siempre y cuando prometas que para cuando lleguemos estarán ya alimentados - Es decir, que les habría dado de comer para que ellos no fuesen la cena. Es que no entendía cómo Audrey se podía acercar a los dragones sin que le hiciesen nada, ¿dónde estaba el truco? Quería impresionar a su sobrino consiguiendo lo mismo que Montgomery pero no había manera y Seth se burlaba de él diciéndole que Audrey sí podía hacerlo y él no .

[Audrey Montgomery]

La rubia asintió con la cabeza cuando comentó que sus acciones serían muy propias de ellos. Pues claro, ¿de quién si no? A ver, que él los había elegido como amigos a pesar de que Gerard fuese especial -vamos a dejarlo ahí - y de que ella se llevase mejor con los dragones que con las personas. Ya sabía lo que había así que no se podía quejar.

- Pero tomar algo en plan tranquis, ¿verdad? No me apetece nada ir a uno de esos tugurios a los que va Grasshopper -respondió mientras se hacía un recogido simple con el pelo. Es que el viento ha empezado a levantar - ¿No queréis venir a darles de comida conmigo? Pero si es genial, muy bonito Oye, ¿sabes que se me está ocurriendo? Podríamos comprar un par de cervezas, una de esas pizzas grasientas y para nada sanas e ir a molestar a Ger ahora mismo. Eso puede contar casi como salir a tomar algo...

[Blaze K. Regal]

Él estaba acostumbrado a salir con Grassshopper la verdad, conocía los lugares que le gustaban al ex-Slytherin y tampoco eran tan malos. Si de algo sabía Gerard no sería de hechizos o pociones pero sí de bares a los que ir.

- La que está de bajón eres tú, así que tú decides el local al que vamos y si Grasshopper se pone tonto pues le llevamos a rastras y ya está - Aunque el peso que estaba cogiendo últimamente les complicaría la tarea. A Gerard le gustaba demasiado comer y muy poco moverse - Eh, esa es una idea genial, Montgomery, chócala - Y entonces él alzó la mano para que Audrey chocase. Pizza. Puff. Nadie en su sano juicio se negaría a eso. Le mandaría un mensaje a Mith para ver si se apuntaba - Venga, vamos - Y así, ambos salieron de ahí para ir a buscar a Grasshopper y acoplarse en su casa.

[Ares Vane]

Lo tiene todo. No se le olvida nada. Bueno, no pasa nada. Tampoco hay que alterarse porque no lleve el anillo, ¿no? Probablemente sea para no perderlo en el trabajo, eso es.

- Claro que he comido -Nunca se fia de que lo haga. No lo entiende. De no haber comido nunca no estaría vivo, podría fiarse a estas alturas. Suelta la mano para pasarle el brazo por sus hombros, acercándola a él. Es que no aguanta tanta distancia entre ambos. El americano siempre tiene la necesidad de tenerla cerca.- Aunque lo disfruto más si puedo comer contigo. -Añadió parando al ver que se quedaba mirando un escaparate.- ¿Quieres entrar? A mi no me importa. No tenemos nada mejor que hacer y no siempre tienes que llevar mi chupa de cuero

[Faith da Silva Campbell]

Claro, el resto del tiempo la brasileña siempre lleva su alianza y está bien contenta. Lo que pasa es que en el trabajo se le puede estropear o perder y no quiere. Por eso tampoco lleva el anillo de compromiso con ella que son dos cosas que la brasileña no se quita nunca porque le encantan.

-Ya sabes que me gusta asegurarme, ojalá haber podido comer juntos -Ella mudo almorzar un bocata así que tampoco está mal. Y sí, en realidad estaba mirando una tienda pero porque tenía cosas de decoración y le había llamado la atención un carrusel antiguo. Le gustan mucho y le ha parecido una monada así que aprovechó que había pasado un brazo a la cintura de Ares para darle un abrazo -. Me gustaría mucho -Y sobre la chupa se encogió de hombros -. No la llevo siempre pero quedaba bien y me abrigaba lo suficiente.

[Ares Vane]

Alzó una ceja y se encogió de hombros, hay cosas que no cambian. Entre la pinta de señor viejo y huraño de Ares y las costumbres de abuela de da Silva se harían viejos a la velocidad de la luz. No le extrañaría nada que dentro de un año y medio dejen de parecer unos chavales recién casados. Gracias a Dios la cara de ángel de Ares y la escasa estatura de Faith vuelve a recordar a una pareja de adolescentes. Aprovechó el abrazo para darle un beso en la cabeza, echando un vistazo al escaparate.

- ¿No te gusta entonces? -Pregunta con tono serio, porque sabe que se va a pegar un susto que valdrá la pena.- No hace falta que te la pongas si no te gusta. Ya sabes que lo único que me gusta son a tus gafas -Añadió buscándola con la mirada.- Bueno, entramos o qué -Sea lo que fuere que le guste, Ares va a comprárselo.